Marcelo Romero se nos ha venido arriba. Tanto lo felicitamos el pasado lunes tras su primera victoria como técnico malaguista que hoy se ha permitido el lujo de hacer rotaciones ante el Eibar.  Debe ser por la extensa plantilla que tenemos y el partido de Champions que jugaremos el próximo martes (ironía modo on). Cierto es que el Málaga se presentaba en Ipurúa sin sus dos medios centro habituales, los que llevaban dos partidos cumpliendo a la perfección, Camacho y José Rodriguez; y ello suponía un serio contratiempo; pero el entrenador del Málaga ha puesto la guinda al desaguisado dejando fuera del once a futbolistas que en estos momentos son imprescindibles para este equipo.

A esta hora de la noche la afición se hace las siguientes preguntas:

1. ¿Por qué no ha jugado Demichelis? El argentino ha demostrado en dos jornadas la importancia de su incorporación, y ha dejado en evidencia los errores de planificación del pasado verano. Este fichaje de invierno supone un lujo para este equipo, a pesar de sus 36 años y de la incertidumbre que generaba su fichaje en cierto sector de la afición.
2. ¿Por qué no ha jugado Charles? Dos goles había materializado en dos partidos. ¿Ha querido reservarlo para el próximo encuentro? ¿Por qué? ¿Acumulación de amonestaciones? ¿evitar posibles lesiones? ¿Es más importante que juegue ante el Betis que ante el Eibar? Expreso mis dudas al respecto. Lo que sí queda demostrado es que la aportación de Michael Santos a este equipo es nula, a pesar de su lucha incansable. Muchas críticas recibió Juande Ramos por su tardanza en incluirlo en el once. Ahora podemos entender mejor la situación.
3. ¿Por qué Duda ha de jugar 56 minutos? Sabemos que puede ser útil 10 o 15 minutos, pero no más. ¿No había en el filial malaguista algún chaval que pudiese actuar esta noche en esa posición? Todos sabíamos de la dificultad de improvisar un centro del campo de circunstancias. ¡Qué más nos hubiese dado que darle la oportunidad a un canterano!

Si “Gato” Romero había hallado en las últimas jornadas un once ideal, ¿a qué vienen tantos cambios? Eso de querer contentar a todos no es buena política. Nos conformamos con que estén en forma para entrar en el once en cualquier momento, pero es evidente que no todos tienen en mismo nivel ni nos podemos permitir el lujo de hacer rotaciones. La Liga es la única competición en la que estamos inmersos, y cuanto antes consigamos la permanencia, mejor para todos.

La derrota del Málaga en Ipurúa ha resultado vergonzosa, porque no hemos perdido ante un grande de la Liga, lo hemos hecho estrepitosamente ante un equipo bastante limitado, por mucho que en su feudo sea complicado de batir. Si vas a Eibar a por el 0-0, lo normal es que pierdas por un gol, no por tres. El Málaga a nivel defensivo ha vuelto a ser una berbena. Y no digamos a nivel ofensivo.

Por último mencionar un nuevo error arbitral al conceder el primer gol de Eibar en fuera de juego. Uno más. Pero no es menos cierto que el día en el que el Málaga sea capaz de ofrecer fútbol de calidad, los árbitros no constituirán ningún problema. No lo fueron la temporada que nos clasificamos para la Champions, tampoco tendrían que serlo ahora.

 

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