El regidor anuncia que recurrirá al Consejo Consultivo para dar salida a la aprobación de reconocimientos extrajudiciales de crédito sin necesidad de acuerdo plenario tras votarse en contra por tercera vez

• Critica que “los grupos municipales antepongan su afán por hacer daño político a beneficiar a las empresas que lo están pasando mal”

El alcalde de Torrox, Óscar Medina, ha lamentado que los grupos municipales de PSOE, IU y TU hayan optado hoy por seguir aplazando el pago de facturas a proveedores locales, al votar en contra de la modificación y de sendos reconocimientos extrajudiciales de crédito por valor de 793.000 euros, postura que el regidor ha calificado de “bloqueo al normal funcionamiento del Consistorio”.

De este modo, ha destacado que “un informe avala la legalidad de esta medida a la que el equipo de gobierno recurre ante la falta de un presupuesto actualizado, frente a las numerosas ocasiones empleadas por el PSOE en el periodo 2011-2015 y favorecidas desde la oposición”, alegando que “se trata de facturas que no se pueden abonar de manera normalizada al contar con reparos, entre otros motivos, por estar vinculadas con actividades deportivas y turísticas y no haberse aprobado unas cuentas locales tras la extinción de sendos patronatos, por entender la Intervención que deberían haberse incluido en un presupuesto actualizado, o simplemente por estar fechadas en el año 2017 y haber sido presentadas en 2018”.

Medina, que ha agradecido no obstante la abstención de FUCIS, ha criticado que “el resto de grupos antepongan su afán por hacer daño político a beneficiar a las empresas que lo están pasando mal por no poder cobrar”, punto en el que ha expuesto que “más de 300.000 euros corresponden a pequeños proveedores locales, colectivos, clubes y asociaciones, siendo facturas por cantidades pequeñas que incluyen desde el pago de flores por la festividad de Nuestra Señora de las Nieves hasta la provisión de sillas a colegios para la celebración de actividades”, ha explicado.

El primer edil torroxeño, que ha señalado su “compromiso de no volver a traer un reconocimiento extrajudicial de crédito como alcalde tras finalizar 2018 para no afrontar de nuevo esta situación”, ha subrayado que “todas las facturas han sido puestas a disposición de los grupos para su estudio, con el fin de aprobar este trámite administrativo y darles salida con prontitud”, apuntando que “en días previos a este pleno se ha celebrado una junta de portavoces y una comisión de control como gesto de transparencia y atendiendo de este modo a los requerimientos de la oposición”.

En esta línea, ha afirmado que “trabajaré desde hoy mismo para pagar las facturas sin volver a llevarlas a pleno, después de que en enero me pidieran dejarlas sobre la mesa y en febrero y marzo hayan votado en contra”, advirtiendo de que “disponemos de informes jurídicos favorables, cumplimos la regla de gasto, contamos con unas cuentas saneadas y un remanente de ocho millones de euros, además de un superávit en 2017 que ronda los tres millones, por lo que este bloqueo no responde más que a una estrategia política”, ha reprochado.

Por ello, ha mostrado su negativa a “entrar a dividir las facturas, tal y como nos han pedido algunos grupos políticos, discriminando de este modo a unos proveedores y colectivos frente a otros, cuando todos han prestado sus servicios y requieren ser pagados cuanto antes”, ha incidido.

Necesidad de un presupuesto actualizado

El alcalde de Torrox ha indicado expresamente que asume su “responsabilidad sobre los gastos generados por el Consistorio durante su mandato”, trasladando su interés por reunirse con los portavoces para aprobar unos presupuestos acordes a la situación real del municipio, poniendo como ejemplo “la generosidad del PP en el municipio vecino de Nerja, donde se ha abstenido para que las cuentas locales de 2018 fueran aprobadas”.

Medina, que ha pedido “generosidad y altura de miras por el bien del pueblo”, ha anunciado que convocará juntas de portavoces de manera periódica para “alcanzar el consenso en asuntos tan importantes como Livitemsa, Aqualia, el caso Barragán y el parking de la Almedina, y para determinar cómo invertir ese superávit generado en 2017”, poniendo como ejemplo el campo de fútbol de El Morche y la Costa, y la Fábrica de Azúcar.

Para ello, ha continuado, “es necesario alcanzar un acuerdo de mínimos y en eso voy a centrar todos mis esfuerzos, para poder realizar inversiones, obras y actividades que a día de hoy no se pueden ejecutar por no disponer de un presupuesto aprobado”, ha insistido.

En este sentido, ha reiterado que “si bien el equipo de gobierno es el responsable de los gastos generados, es la oposición quien tiene la solución en su mano para el pago de estas facturas”, cuestionando “por qué al anterior gobierno socialista se le aprobaron hasta seis reconocimientos extrajudiciales de crédito por valor de 980.000 euros y a mí se me vota en contra para tratar de paralizar el pueblo; no estoy dispuesto”.

“Otros partidos han gobernado en minoría y han contado con el apoyo del grupo popular para el pago de facturas a proveedores, por lo que este bloqueo económico no tiene precedente en nuestro municipio y no responde más que al nerviosismo de los grupos municipales”, ha concluido.

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