Barbara Hendricks, quien abrió ayer con su actuación la quincuagésimo novena edición del Festival Internacional de Música y Danza Cueva de Nerja. 

La artista, que ha cantado ante un auditorio repleto, compuesto por unas 450 personas, ha presentado de manera magistral los temas que componen su último espectáculo, ‘The road to freedom’, enmarcado en los timbres característicos del blues, el góspel y los espirituales negros. 

El recital, que ha contado con la presencia del presidente de la Fundación Cueva de Nerja, Miguel Briones, el gerente de la institución, Luis Díaz, y la alcaldesa del municipio, Rosa Arrabal, entre otros representantes públicos y del mundo de la cultura, ha evocado el espíritu luchador de una mujer que representa la lucha contra la segregación racial y por los derechos civiles en Estados Unidos. 

Hendricks, que se ha dirigido al público en español y ha presentado a la banda al comienzo del espectáculo, ha reivindicado la importancia del movimiento por la libertad encabezado por Luther King en la década de los años 50 y 60, tal y como reflejan los temas de su repertorio, entre ellos, ‘Down in Mississippi’, ‘Dark was the night’, ‘Glory Halleluja’, ‘Strange Fruit’ y ‘Amazing Grace’.

La primera artista norteamericana distinguida con el Príncipe de Asturias de las Artes, reconocida en el año 2000, ha estado acompañada sobre las tablas y bajo el incomparable escenario de la cavidad nerjeña por Mathias Algotsson al piano y órgano, y Ulf Englund a la guitarra. 

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