Se deshojó la margarita y, finalmente, como estaba previsto, se jugó el Málaga-Reus tras una semana en que los despachos y las redes sociales echaban humo.

Con un campo que no llegaba a la mitad de ocupación al comienzo del partido, a pesar de las más de 4.000 entradas donadas por el MálagaCF a 63 entidades sociales, comenzaba la jornada 20 para ambos clubes en La Liga 123. A destacar que, al salir a calentar el equipo visitante, una ovación les recibió por parte del malaguismo en modo de reconocimiento al esfuerzo que hacen sus jugadores debido a su actual situación económica y de incertidumbre. La situación se repitió, gratamente, cuando el Reus se retiró al vestuario antes del comienzo del primer tiempo y volviendo a ocurrir al nombrar la alineación catalana.

Comenzaba el partido con ambos equipos bien situados en defensa y en el centro del campo, llegando la primera ocasión para los locales con una inocente chilena del venezolano Juanpi.

Seis minutos después, llegaría el que supondría el 0-1 en el marcador. Borja Herrera marcaba de cabeza tras su tercer córner del partido, en la que la defensa local parece que ni vio el balón pasar. Un Málaga que no daba con la tecla, sobre todo por el asedio de la defensa local, era incapaz prácticamente de llegar a la meta rival. No puede ser Juanpi el epicentro del partido en el ataque. Sin duda, el Málaga tiene delanteros con “más ganas” que él, como han demostrado Leschuk, N´Diaye y Harper. Y más sabiendo que la eficiencia sube como la espuma cuando se ataca por las bandas, no intentando entrar por el centro.

El primer tiempo fue tedioso, aburrido y enfadó a la afición local por el mal planteamiento que estaba desarrollando el equipo. Prueba de ello fueron las pitadas por la poca eficiencia de los locales. Salvando una peligrosa intervención de de N´Diaye y el buen hacer en la banda derecha del granadino Cifu, poco hay que aplaudirle a un equipo que parecía no tener ganas de plantar la cara a un rival, a priori, inferior. Les doblamos en puntos, pero está claro que en el primer tiempo no les hemos doblado ni en calidad, ni juego, ni nada que se le parezca. Las continuas búsquedas de Juanpi deberían haberse alternado con otros delanteros.

De ahí que el segundo tiempo tanto el venezolano Juanpi como Dani Pacheco fuesen sustituidos durante el descanso por Renato Santos y el debutante Hugo.

El Málaga salió con ímpetu en la segunda parte, con muchas ganas. El nuevo planteamiento de Muñiz parecía dar resultado, pero solo le duró 20 minutos tras el segundo gol, de penalti, de los visitantes tras un claro fuera de juego del delantero catalán. Tras ese momento, los locales parecían un pollo sin cabeza que era aplastado por un  Reus que jugaba a la desesperada. Los últimos diez minutos se pueden calificar de vergonzosos. Pocas veces he podido ver a un Málaga tan descolocado y con tantos fallos, tanto en defensa, en el centro del campo y, como no, una delantera que sólo se ha lucido durante un rato.

En rueda de prensa, Bartolo, el entrenador del Reus, aseguraba que esta liga está adulterada, tras el acoso de la AFE que no ha permitido a sus jugadores y al cuerpo técnico concentrarse ni preparar el partido en condiciones, a lo que yo añado: menos mal… (léase con ironía). Posteriormente, aseguraba que el vicepresidente de la AFE se ha vuelto a reunir esta mañana con los jugadores en el hotel donde están alojados, cosa que no entiende. Poco más que añadir a sus declaraciones, ya que poco ha hablado del partido y mucho de la situación del club. Eso sí, destacar que ha agradecido a la afición malaguista su recibimiento y muestras de cariño y solidaridad.

En cuanto a Muñiz, le ha quitado hierro al resultado del partido. Ha asegurado que no deja de ser un partido más. Ni por perder nos vamos a venir abajo ni por ganar vamos a pensar que ya estamos en primera, aseguró. Igualmente, no somos aspirantes a primera división, somos un equipo que ha bajado y en marzo o abril ya veremos lo que pasa.

Agradecer a más de los 16.000 malaguistas su asistencia esta fría noche al partido siendo un día tan especial.