Agentes del Grupo de Protección de la Naturaleza (Gruprona) de la Policía Local de Málaga han rescatado a un ejemplar de buitre leonado que fue divisado el pasado lunes 7 de noviembre por las inmediaciones del Cortijo Jurado, en la zona de Campanillas, por un policía que se encontraba franco de servicio.
Tras percatarse de que el ave se encontraba debilitada y no lograba levantar el vuelo, el agente contactó con el Gruprona, desplazando una unidad y recorriendo la zona sin conseguir localizarlo en primera instancia, hasta que, minutos después, fueron informados desde las dependencias de la Jefatura de Policía de Barrio Distrito Campanillas de la Policía Local de Málaga de una llamada en la que comunicaban que el buitre se encontraba en el interior del núcleo urbano de Campanillas, concretamente en calle Bratislava, en la barriada El Brillante.
Los policías locales del Gruprona se desplazaron hasta el lugar, comprobando que se trataba de un buitre leonado, el cual estaba en la cubierta de un edificio, han indicado desde la Policía Local en un comunicado. Con la ayuda de vecinos de la zona, los agentes consiguieron acceder a la azotea, si bien el ave volvió a iniciar el vuelo hasta posarse con dificultad en la valla delimitadora de una vivienda de la misma calle, siendo en ese lugar donde los policías locales finalmente lograron capturarla. Uno de los agentes se ayudó de un zalabar para capturarla.
Una vez rescatado, el buitre leonado fue introducido en un trasportín y trasladado en vehículo policial adaptado a tal fin al Centro Zoosanitario Municipal, donde quedó para su cuidado hasta ser recogido por personal del Centro de Recuperación de Especies Amenazadas (CREA), con sede en el Parque Forestal Montes de Málaga.
El ave no presentaba heridas, encontrándose en buen estado, salvo el agotamiento que presentaba motivado por su viaje migratorio hacia el Sur, que suelen iniciar entre finales de octubre y principios de noviembre. El hecho de que el animal haya parado en una zona urbana ha posibilitado su rescate, ya que de haber parado en una zona despoblada podría incluso haber fallecido por inanición.