El tomate es un alimento fundamental en cualquier dieta equilibrada, ya que reduce los riesgos de desarrollar una enfermedad no transmisible como la diabetes, el cáncer, las cardiopatías o los accidentes cerebrovasculares, tal y como recoge la Organización Mundial de la Salud. Además, es rico, saciante y nutritivo.
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De pera, Cherry, Raf, Margoble, el valenciano, el canario… Se calcula que se han llegado a cultivar hasta más de 10.000 variedades de esta fruta, de las que un 10% nacen en suelo español. Sin embargo, no todas las podemos encontrar hoy día en los mercados, aunque sí es cierto que cada vez más existen tiendas especializadas donde sí se pueden encontrar variedades atípicas.
No todos los tomates tienen el mismo precio. Para dar con el más caro tenemos que viajar a la provincia de Málaga, concretamente en el Valle del Guadalhorce. Allí se lleva cultivando desde hace 50 años el Tomate Huevo Toro, que se caracteriza por su intenso color rojo (debido al alto contenido en licopeno que tiene) y su extraordinario tamaño: cada pieza suele pesar entre 300 y 600 gramos.
Es un tomate multilobular, cuenta con pocas semillas y tiene un corazón carnoso. Su sabor en boca resulta muy suave además de cremoso, con un punto equilibrado entre la acidez y el dulzor, según recoge la Asociación de Productores/as de Tomate Huevo Toro, que pone en valor a esta hortaliza tan delicada de la agricultura malagueña.
Su cultivo necesita mucha mano de obra, pues requiere labores de poda, destallado y entutorado. Además, al tener la piel muy final, la recolección, el envasado y la comercialización se deben hacerla con mucho cuidado. Por otra parte, es difícil venderlo al ser poco vistoso y tener grietas. Es feo, vaya. De ahí su precio. El Tomate Huevo de Toro cuesta en torno a tres euros el kilo si se compra directamente en la propia productora, pero el precio puede doblarse en mercados de la zona.
La campaña de esta variedad de tomate es amplia, pues puede comenzar en junio o julio y durar hasta octubre o inicios de noviembre, en función de las lluvias y el frío. Esto se debe al clima que disfruta Málaga, caracterizado por los cielos despejados y las cuantiosas horas de sol. Sus tierras, además, son ricas en agua, algo primordial para el crecimiento de esta fruta.
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¡¡ Corre tía, aprovechemos lo que nos queda !!
Jamás habíamos vivido como ahora, a todo lujo, llenos de criados, y lo mejor, TODO GRATIS, por eso me critican cuando pacto con quien sea, al precio que sea, no saben que lo único importante soy yo, solo yo, y nada más que yo.
Desde luego, aprovecha porque a partir de las próximas elecciones, no vas a volver a ver un Falcón, nada mas que volando por encima de ti.